martes, 15 de diciembre de 2009

Tardor


Cauen, gota a gota, les finestres del pati.
Tot és llum grisa
desde que va obrir les seves ales el firmament.
I ara,
com pedres diminutes, cauen
totes les cançons d' estiu.
Torno de roig a ser poeta.
Poeta: El vell mullat abric desat sobre la taula
i la ma enroscada a un tros de fulla de tronc albí
mentre penso... - de nou, no soc més que capità d'ombres -

jueves, 10 de diciembre de 2009

Soñé libertad








He soñado azules los balcones,
el caballero diciendo:
-¡Niña corre!
que han muerto ya sus ideas
y todo de cielo se ha vuelto-
Y yo corría, corría sin parar
empapandome de aire
sintiendo en mis costillas libres
las alas liberadas.
Y gritaba, gritaba sin parar:
-¡Acabada está la estaca!-
El fin de todo aquello que ata,
sin errores ajenos en nuestras piernas
podemos volar sin prision
ni obligadas penas.
Y reía, reía sin parar...


Desperté riendo en un mundo gris.

lunes, 7 de diciembre de 2009

¡Bésame!


Haz que acabe ésta espera,
antes de que venga otra ave
y con su descaro
vicie tu sutil perfume.
Brillo de plata,
sé que me miras,
sólo...
acércate,
despacito,
como la mano que acecha
expectante.
Ven,
encarcela mi aire de anhelo,
cerca mi boca,
prisión de cielo,
hasta que olvide
como se respira.
Quiero ser tus labios
perfilando
ésta cruel condena
paso a paso,
suspiro a suspiro,
con tiempo infinito
y finitud muda.
Suave,
quiero sentir, lento,
tus plumas de nácar.
Sólo bésame...

Las murallas de Carcassone (4)


Salíamos, esa fue mi conclusión, nos marchábamos de aquel roñoso lugar hecho de rocas, aquel castillo inmenso y agotador. Me di cuenta de ésto ya pasadas horas tras mi fantasmagórico amigo. Horas... ¿o quizás días?
Qué más daba, lo importante era que cada vez la altura descendía y la luz se amansaba, podía ver a través de las pequeñas rendijas de las murallas que no estaba mucho más alto que las copas de los árboles y eso quería decir que pronto tocaría la tierra firme de la calle, no aquella estúpida piedra medieval...

El ermitaño guía de manos rojas seguía delante mío, ya no desaparecía, debía ser que le agradaba mi compañía y mi olor a sudor, o quizás le encantaba verme sufrir cuando la luz se apoderaba de cada rincón.

Bajamos por un largo y ancho camino rodeado de pequeñas estancias oscuras y vacías, puertas abiertas de par en par que dejaban adivinar muebles viejos y olvidados... tanta soledad, todo cubierto del abandono y los recuerdos perdidos... me pregunté si aquello era el infierno pero olvidé cada uno de los pensamientos que venian a mi cabeza cuando, a lo lejos, se dibujó ante mi la inmensa puerta que daba al exterior.

Corrí.
Corrí como loco dejando atrás el ridículo fantasma.
Traspasé la puerta y corrí entre pinos y robles... y solo en un atisbo de curiosidad decidí mirar atrás a despedir mi condena y observé aquel castillo de cuentos oscuros que por un momento me pareció incluso un reino de belleza.

Luego seguí corriendo celebrando una libertad que... desde el fondo amargo de mi ser... sabía que aún no podía ser mía. Tan fácil, tan absurdo...










Pic. Lluna

Las murallas de Carcassone (3)

Resultaba inquietante seguir a la nada.
Pasé caminando un largo rato sin saber hacia dónde me dirigía ni dónde estaba, pero aquella figura fantasmal de vez en cuando aparecía frente a mi indicándome el siguiente paso...
...derecha...izquierda...un arco...una puerta... un pasillo...

Todo un monton de aburrida piedra cubierta de aquella bochornosa luz que mis ojos empezaban a odiar más que lo que había odiado jamás la humanidad, y tengo que decir que a ésta la odiaba... con una rábia infinita. Aquella luz... me causaba una ira tan profunda que deseaba matarla, pero la energía es inquebrantable, no como la estúpida fragilidad humana.

Por fin pasé por un arco pequeño y me resguardé un rato en la oscuridad de un rincón de sombras, me senté en el suelo ya cansada de caminar y respiré exhausta.

Debí imaginar que aparecería de un momento a otro mi fiel acompañante, como tantas veces, de la nada aquel fantasma sin rostro, que se cubría curbado con un manto color plata, y que con sus manos rojizas unidas en el pecho... me indicaba mi camino...

Una nueva puerta se abría a mi espalda (de la cual ni siquiera me había percatado), y más allá, nuevos pasillos y escaleras, más piedra y luz...

¿Cuánto duraría aquello?


Deseé volver a mi prisión por unos segundos eternos...








Pic.Lluna

Las murallas de Carcassone (2)


Decían que los niños no los traía la cigueña desde París, que la cosecha que recoges te la siembras tu mismo, que los sueños se consiguen con esfuerzo... pero aquellos dias dudé de cada uno de los consejos que mi abuela me daba cuando era pequeña.
Allí estaba la piedra mágicamente abriéndose paso frente a mi. Desde aquella primera humilde ventana se habian ido formando de las gruesas paredes unos ligeros barrotes oxidados que posiblemente pronto se acabarian rompiendo o si no... desaparecerian como si nada, igual que todo lo demás.

Ya podía apreciar con mucha más claridad lo que esperaba cuando fuese libre. Tras los barrotes se apreciaba una estructura de gruesa piedra que recordaba a las formas de un castillo antiguo, bajo mis pies empezaba una escalera que llegaba hasta un pequeño camino de piedra cobijado por un arco inmenso.
Al otro lado un laberinto de escalones y caminos circundantes a los que no temía...Todo era un bonito cuadro que anunciaba el momento que al fin sería libre, libre... la palabra resonaba en mi cabeza de una forma tan intensa que me mareaba.
Pronto sería LIBRE.

Y observando mi salvación igual que si se tratase de la inmortalidad, el momento en que pisaría el exterior sin haber hecho... nada, sin siquiera arrepentirme del crimen que había cometido. En medio del extasis de mis sentidos...
Una sombra oscura bajo el arco de mi triunfo esperaba serena.







Y sin saber porqué... me invadió el temor.






Pic.Lluna

Las murallas de Carcassone














Se abrió una grieta en la pared rocosa, sin causa, sin nombre. Se fue formando vertiginosamente un pequeño abujero de trazos desiguales que inspira a mi mirada cierta curiosidad. Después de tanto tiempo encerrada en aquel lugubre lugar la luz se hacía algo atractivo a mis ojos, pero peligroso, algo que inspiraba el temor más intenso y la atracción más fatal.

Me acerqué tímidamente para conocer lo que esperaba al otro lado... y solo reconocí formas borrosas y sin sentido. Bueno, al fin y al cabo ahora algo había cambiado, quizás pronto sabría lo que esperaba más allá de mi prisión.








Pic.Lluna

sábado, 5 de diciembre de 2009

Loco

Sentado en una silla de metal.
Paredes blancas. Traje blanco. Alma pálida.
Le apreta la camisa en los brazos adormilados pero no se atreve a moverse, podría caer, podría hacerse notable su pérdida en una lucha contra el tiempo.
Mejor callar y que no reaccione el cuerpo.
Quiere explotar, pero la cordura se apodera del hecho de reir o llorar su rábia... entiende que nadie podría aceptar tal lucidez.


Impregna con la mirada la minúscula sala que se cree un hogar. No hay detalles en las paredes acolchadas, sólo siempre la misma forma hipnotizante que hace a sus huéspedes somnolientos.

¿Cuándo fue que empezó a descubrir que el mundo está completamente loco?

Ellos, que crean prisiones, imaginan formas de matar, juegan: unos a gobernar y otros a obedecer, compran y venden formas de vida y vivir, que siguen modas para no sentirse solos, viven para trabajar, gastan por dinero, que existen para inmolarse lentamente con prejuicios, comida grasienta y hipocresía...

¿Quién les dirá que están locos?

Él que tan solo quiere vivir vivo, por él, por la sencillez de ser.

Colores, olores, placeres, instintos.
Lo demás es obra de un puñado de animales con miedo a morir.


Tiene ganas de correr así que empieza a gritar para que ellos vengan a hacer uso de su mente mal situada en superioridad y sí, allí vienen con la jeringa de plástico, su única amiga desde hace meses.

Le sujetan entre tres y le clavan sueño...

Mucho sueño...

La silla en el suelo. Cae.
El suelo cada vez más cerca.

Se escucha lejana la canción que cantaba su abuela cuando aún era un crío no lo suficientemente inocente.

-Duerme niño, duerme antes de que la noche se acerque, ya se duerme toda la gente así que duerme niño, duerme y así los sueños serán sonrisa y la vida un dulce por siempre. Duerme...-

La nana se acerca tanto que se torna estridente en su cabeza y se tapa los oídos.

-DUERME NIÑO, DUERME ANTES DE QUE LA NOCHE SE ACERQUE...-

Y cierra los ojos, y por un momento logra olvidarlo todo, hasta las béstias, las pasiones, los hombres, las nanas, los cristales rotos...
y un mundo lleno de locos...

viernes, 4 de diciembre de 2009

Nana de otoño


La puerta entre abierta
del dominio anticuado y seco
se insinúa entre flores violetas.
Una silla derrochada
en la soledad de un arco
entre oxido y mugre se sienta.
El gato acechando observa
tras la mesita perdida y coja
en el desamueblado patio
y el reloj,
el reloj ríe en su poder
del tic tac de todo lo que queda
de aquellos infinitos ratos.
Dentro...
"Las flores de noviembre
caen hermosas..."
canta la nana de otoño
una anciana que se sigue
entre el vaivén de los días.
Espera la señora
bajo el color de las hojas
por si vienen a buscarla
las pasadas alegrías.
Y si el final fuese un papel
de alambre enredo y desplumado,
en su mano humilde descansa.
Y cuando el seno se vacía
y la voz quebrada canta,
fuera un descarriado gorrión
en la ventana se posa
a escuchar la dulce melodía
mientras el viento feroz
avanza.
Más allá ríe y ríe el reloj,
el gato acechando observa
y una silla derrochada
entre oxido y mugre se sienta.
Ignorante, la puerta entreabierta
del dominio anticuado y seco,
se insinúa entre flores violetas.